17 de outubro de 2010

Apenas pasaron 30 años

Un amigo me mandó un email en el que aparecía la dirección a este video, sin palabras, sólo la dirección, y tras verlo me he llenado de palabras y de tristeza.

Mis palabras y mi tristeza se mezclan con las palabras de esa profesora que proclama que los niños tienen un problema de bilinguismo, que no saben hablar castellano, que callan porque no saben,... cuando después podemos ver a esos mismos niños hablando PERFECTAMENTE en castellano. Se empeñaron no en que aprendiéramos otras lenguas, si no en enseñarnos sólo la otra, la buena, la elegante y la correcta, presentando la nuestra como un problema, como un atraso, como algo a superar. Se empeñaron, se empeñan, en matar nuestra cultura, nuestra lengua y lo están consiguiendo, hoy los niños SÍ tienen un problema de bilinguismo porque no sólo no saben hablar gallego sino que apenas lo entienden.

Como dice Quinindiolas, de quien tomo prestadas sus acertadas palabras. Non teñen perdón!

Y lo más doloroso la abuela, que traduce su anaina al castellano, a la lengua culta, a la lengua correcta. Qué triste por dios y qué triste la incomprensión que genera esta tristeza :(







Un amigo mandoume un email no que aparecía a dirección a este video, sen palabras, só a dirección e despois de velo enchinme de palabras e de tristura.

As miñas palabras e a miña tristura mistúranse coas palabras desa mestra que di que os nenos teñen un problema de bilinguismo, que non saben falar castelán, que calan porque non saben,... cando despois podemos ver aos mesmos cativos a falar PERFEITAMENTE en castelán. Empeñáronse non en que aprendéramos outras linguas, senón en aprendernos só a outra, a boa, a elegante e a correcta, presentando a nosa como un problema, como un atraso, como algo a superar. Empeñáronse, empéñanse, en matar a nosa cultura, a nosa lingua e estanno a conseguir, hoxe os nenos SI teñen un problema de bilinguismo porque non só non saben falar galego, senón que apenas o entenden.


Como di Quinindiolas, de quen tomo prestadas as súas acertadas palabras. Non teñen perdón!